Los suplementos dietéticos incluyen vitaminas, aceite de pescado, hierbas, minerales como el calcio y mucho más. Y si tomas alguno, no eres el único. Aproximadamente la mitad de los adultos lo hacen. Pero, ¿debería hacerlo?. Nos preocupa cuando veo que la gente toma uno de estos y otro de aquellos, sólo porque han leído en alguna parte que un suplemento es útil. Es fácil que se produzcan desequilibrios, y puede que no seas consciente de ello.
Como nos dice supradyn: La comida es la mejor manera de obtener las vitaminas y los minerales. Pero a veces puede ser difícil comer suficientes verduras frescas, frutas, cereales integrales y otras opciones saludables. Un multivitamínico puede ser una forma segura de aumentar tus nutrientes.
¿Necesitas un suplemento?
La mayoría de las personas sanas no necesitan uno. Pero algunas personas pueden necesitar ayuda adicional, dice Jerlyn Jones, dietista registrada y portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética. Las razones son, por ejemplo, si eres anciano, tomas ciertos medicamentos o no tienes fácil acceso a alimentos saludables debido a tus ingresos o al lugar donde vives.
Hable con su médico si
Está o podría quedarse embarazada. Es posible que no obtenga suficiente hierro de los alimentos, especialmente si tiene náuseas matutinas. Y todas las mujeres que estén embarazadas, o que intenten estarlo, deben tomar ácido fólico. Las vitaminas prenatales te dan un colchón extra de seguridad.
Cuidar a un niño pequeño. Los bebés y los niños pueden necesitar ayuda para obtener vitamina D y hierro.
Llevar una dieta restringida o limitada. Es más difícil obtener algunos nutrientes, como la vitamina B12 o el calcio, si se omiten ciertos grupos de alimentos. Eso puede ocurrir si eres vegano o tienes alergia a los lácteos.
Tienes más de 50 años. Tu cuerpo empieza a absorber menos vitaminas D y B12 a medida que envejeces. Al llegar a la mediana edad, es posible que tengas que tomar medidas adicionales para obtener la cantidad suficiente.
Se ha sometido a un bypass gástrico. Es posible que su intestino no absorba tan bien los nutrientes.
Tiene ciertas condiciones genéticas o de salud. Puede tener problemas para absorber los nutrientes si tiene:
- Enfermedad inflamatoria intestinal (como colitis ulcerosa o Crohn)
- Enfermedad celíaca
- Fibrosis quística
- Enfermedad hepática
- Cáncer
- Un trastorno autoinmune (como la anemia perniciosa)
- Dependencia del alcohol
- Una mutación en ciertos genes
- Piel más oscura (puede absorber menos vitamina D)